El aceite de pino es claro, de color amarillo pálido, con un definido olor a pino; de baja volatilidad, solvente poderoso para muchas resinas, aceites, grasas y ceras; muy baja solubilidad en agua, promueve la actividad superficial, alta actividad bactericida cuando tiene una concentración adecuada en productos de limpieza; posee excelentes propiedades humectantes, penetrantes, dispersantes y de suspensión.